viernes, 31 de octubre de 2008

25 años atrás vistos desde hoy

Hace 25 años, un día como hoy estábamos festejando la primavera y la democracia.
Cuando yo tenía 16 años, andaba con una boina blanca que me había hecho mi mamá - a mi hermano también-. Iba a la casa radical, vivíamos en un momento de euforia y participación política. Un grupo de adolescentes interesados concurríamos con frecuencia semanal a reuniones en la sede del partido en Bell Ville. Me acuerdo que nos organizamos, (¿ó nos habrán organizado?) hicimos una votación y constituímos la O.R.E.S. Organización radical de estudiantes secundarios. Queríamos hacer, contribuir, participar. Fui elegida vicepresidente de la ores en una votación democrática. Muchos años después, un compañero de esas andanzas me dijo que en realidad había ganado yo, pero como era mujer, los hombres del partido habían decidido que era mejor que el segundo ocupara el cargo. No sé si será cierto, pero visto desde hoy no me parece extraño. ¿Para qué querrían a una jovencita con ideas renovadoras en un cargo político partidario? las mujeres representan el desorden en una organización masculina, las mujeres que se queden en las casas. Mejor así, menos mal que alguien más decidió por mí. Para qué me hubiera servido ocupar un lugar así. Un cargo que no servía para nada. Me acuerdo que teníamos tanta pasión democrática que queríamos hacer cosas y exigíamos participación. Una vez nos dieron un tarea muy "importante" para la ciudad. Relevamiento de tránsito nos dijeron. Y nos fuimos entusiastas y nos sentamos en las esquinas del centro a contar los autos que pasaban. Llevábamos prolijamente un conteo de cuántos autos pasaban por hora por esa esquina, completábamos planillas manuscritas y las llevábamos a la sede. En mi ingenuidad o mi ilusión no podía ver eso como una gastada. Creo que lo hice dos días seguidos hasta que los comentarios y las caras de la gente me hicieron darme cuenta de la inutilidad de esa acción. Ahora con el paso de los años, la experiencia y el conocimiento de la historia más reciente, me imagino que éramos un estorbo. ¿Qué hacemos con estos chicos? habrán pensado ....y los mandemos a la esquina a ver si llueve!..., y nos mandaron a contar autitos. A la distancia pienso en el poder, en la exclusión, en los deseos, en la construcción de comunidad. Todos esos chicos que teníamos ilusión y deseo de participación ciudadana quedamos en el camino, el camino del desinterés, la indiferencia, la negación. Recuerdo las lágrimas el día que renunció Alfonsín. Recuerdo la imagen en la pantalla del televisor, la voz de la derrota dando explicaciones de lo que no se podía entender. Y lloré como dos días seguidos.

Hoy también amanecí triste, ayer estuve de velorio, falleció mi tío Pedro, el que se enojaba cuando me veía con la boina blanca. Mi tío que trabajaba desde los 12 años, y trabajó hasta los últimos días, todo el tiempo que su cuerpo le permitió.
Mi homenaje para él es recordarlo con este video, grabado un domingo de julio de 2006, jugando con mi sobrino después de compartir un almuerzo en familia.